La Señal Medios Sentir, pensar, actuar
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Por GABRIEL FERNÁNDEZ *
Hemos informado sobre los senderos de la unidad. La acción del movimiento obrero, la situación en el orden político del movimiento nacional. Y hemos planteado los análisis derivados de los variados aspectos que componen esa realidad en proyección.
Aunque vamos a seguir adelante con ese lineamiento, hagamos un alto para considerar un aspecto del que no se habla. Y, dadas las circunstancias advenidas tras las elecciones del 2015, resulta importante. Nos referimos al sostén de la campaña electoral.
Es preciso señalar lo evidente: la derrota de aquél entonces fue exigua –un punto- pero tremenda, porque dejó un mapa político en el cual las principales cajas recaudatorias quedaron en manos del PRO Cambiemos.
Nación, claro; Ciudad de Buenos Aires, provincia de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, Mendoza, en manos liberal oligárquicas. Otras también. El macrismo, sin un ápice de honradez ni vocación ciudadana, no trepida en la utilización política partidaria de esos recursos. En tanto, sigue con el discurso para zonzos: “Al ladrón, al ladrón”.
Desde el campo nacional popular, junto a varios distritos sometidos al chantaje permanente del centro gubernamental, apenas si puede contabilizarse como una “provincia” de volumen económico trascendente, La Matanza. Que no es provincia, pero es un estado en sí mismo.
El presente es paradojal, porque mientras la economía nacional se hunde mediante la baja del consumo, la apertura industrial y la financierización, el gobierno cuenta con recursos para, en un año y medio, desplegar una acción comunicacional intensa. Son dineros que no deberían recalar allí pero sabemos que la perspectiva es ostensible.
Está arrancando la campaña 2019 y su importancia es elocuente. Otros cuatro años de macrismo pueden resultar letales. Es preciso ser bien concientes que el desnivel estructural que se percibirá el año venidero en la propaganda será profundo. A semejante desajuste económico se le ha de sumar, por supuesto, el control mediático de soporte tradicional.
La militancia de base, sin complejos y sin dejarse guiar por falsos debates impuestos, tendrá un rol decisivo. Hay que reflexionar sobre esto. La experiencia en distintas zonas del movimiento es vasta al respecto, pues no se trata de la primera vez que se afronta una campaña en estas condiciones. Pero hay elementos nuevos a considerar. Y desafíos muy riesgosos.
Se necesitará un diseño bravío e inteligente.
Desde nuestros medios haremos más de lo posible.
- Director La Señal Medios / Sindical Federal / Area Periodística Radio Gráfica
