La Señal Medios Sentir, pensar, actuar
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Por GABRIEL FERNÁNDEZ *
ENERGÍA. Las modificaciones en zonas de gobierno no han sido lineales. En la edición reciente de esta saga explicamos los desencuentros entre el ministro Nicolás Trotta y su vice –hasta hace pocas horas- Adriana Puiggrós. Es justo indicar que en la región económica del Estado el arribo de Norman Darío Martínez en reemplazo de Sergio Lanziani da cuenta de un intento por fortalecer posiciones nacionales. El gran denunciante de Mauricio Macri en el Congreso, amparado en las revelaciones de los Panamá Papers, arriba a la Secretaría de Energía con una trayectoria de contraste agudo con las compañías que hegemonizan la actividad.
Hasta ahora, el diputado neuquino del Frente de Todos fue un dinámico titular de la Comisión de Energía de la cámara baja. Martínez, que dialogó en numerosas ocasiones con La Señal Medios, posee una visión estratégica firme acerca del derecho y la necesidad estatal de meter mano en ese rubro esencial. En una charla directa con un reducido núcleo de periodistas y referentes del peronismo, en el marco de “Las Tres T” que se convocaron durante el ciclo liberal para sostener vasos comunicantes en el seno del movimiento, el dirigente nos brindó un crudo panorama de la fuga de capitales, la evasión y la importancia de tomar en cuenta el funcionamiento de las firmas privatizadas de servicios públicos.
Quizás la única objeción que se le pueda formular sea el rechazo a su primer nombre de digno origen Hitchcock. Pero claro, es probable que Martínez haya reflexionado en su adultez: si me van a identificar con un protagonista de película célebre, hubieran buscado uno “bueno”. Lo cierto es que a partir de ahora una de las pruebas más intensas radicará, más que en su actitud inicial hacia las corporaciones, en su capacidad para escuchar a los sindicatos del sector y tomar en cuenta a los usuarios. La Corriente Federal de Trabajadores, a través de Carlos Minucci (APSEE) tiene varias cosas para decir al respecto.
DINERO. Amparadas en la última reunión de la CEPAL, pero también en criterios propios, nuestras Fuentes Seguras anticiparon que el Banco Central de la República Argentina utilizará todas las herramientas para evitar que un exceso de liquidez perjudique la vuelta del crédito y la continuidad del ahorro en pesos. La emisión de dinero ha sido intensa y justificada por la cuarentena; de otro modo esto sí sería un callejón sin salida. Pese a los objeciones planteadas por este periodista a la suba de precios, señalaron que “con lo que se emitió y con las características de los formadores, esto podría haber sido híper, y el equilibrio se sostuvo”. Más adelante retomamos la cuestión.
¿Cuál es el planteo cepalino que los contiene? Un acierto de proporciones: la secretaria ejecutiva de la entidad, Alicia Bárcena, señaló dos días atrás que “la austeridad fiscal no será una opción en el corto plazo” y fundamentó la observación en la importancia de sostener la actividad en el marco de la pandemia. Lo hizo en un importante foro –televisado, como todo ahora- de ministros de Finanzas latinoamericanos. Por supuesto que nada es completo, ya que la austeridad proclamada por los liberales nunca es una opción eficaz para el desarrollo económico. Pero el paraguas que implica el comentario representa un buen argumento para responder las zonceras que siguen lanzando “especialistas” y medios antiproductivos.
La discusión, que involucra de modo directo a las posibilidades de recuperación de la economía nacional, tiene cuerpo: nuestros informantes recordaron que “desde marzo, el Banco Central transfirió al Gobierno $1.365.000 millones, y su crecimiento exponencial se dio en los meses de abril y mayo, cuando el impacto económico de la pandemia fue más fuerte”. También dijeron algo sobre un punto que resultó ariete de nuestros cuestionamientos al macrismo. “Gracias a la política de baja de tasas concretada desde diciembre del año pasado -que llevó a las Leliq de 62 al 38%- y a un mayor uso de Pases, cuya tasa activa es de 19%, se lograron mejores condiciones para la inversión productiva futura”.
Eso no sólo es cierto. Vale un acápite para recordar las condenas de la Gráfica a la acción económica de los amigos y socios Mauricio Macri y Nicolás Dujovne: el establecimiento de tasas de referencia altísimas durante el oprobioso tramo 2016 – 2019 derrumbó las posibilidades industriales nacionales y orientó todo capital hacia la especulación. Haber quebrado esa tendencia es un logro que merecería mejores narradores para ofrecer un premio justo a la labor de Alberto Fernández – Martín Guzmán – Matías Kulfas y compañía. Dos preguntas surgen con naturalidad. ¿Porqué ningún medio público lo señala? Y ¿Porqué los objetores populares de la gestión no lo reconocen?
Finalmente –en este rubro- nuestras Fuentes señalaron que aquellas prevenciones sobre opciones de construcción se van angostando. Ese problema sí que no está resuelto. Pues al persistir el esquema monopólico en tantas ramas al gobierno se le hace cuesta arriba sostener precios equilibrados. A medida que mejore el panorama habrá más demanda de dinero y perspectivas de consumo, y al no existir empresas estatales que fijen bordes, las concentradas intentarán absorber cada billete en circulación. El renovado vínculo con las cooperativas y los espacios de la economía popular es un sendero, pero necesita una inyección potentísima para insertarse en la batalla por el mercado interno argentino.
Este periodista no se posicionó como portador de la verdad, pero si dijo “Ejem”.
INDUSTRIA. En línea con las informaciones vertidas en el artículo de diez días atrás, retomaron la carga al señalar que “la actividad industrial volvió a mostrar signos de recuperación en sintonía con la baja del aislamiento preventivo. Mostró una mejoría 0,7% en relación con junio”. Como recordarán los lectores, la variación intermensual con mayo ya había resultado positiva. Los datos refrescantes se destacan en las ramas industriales, donde la recuperación alcanzó un 6 por ciento. Es preciso ser justos y señalar que nuestros informantes recordaron que el interanual sigue dando negativo. “En esa comparación año por año, la industria acumula un retroceso del 10%”, admitieron mientras uno de los consultados agitaba ante la pantalla del celular el informe de FIEL.
Atenti, decimos desde aquí, pues la amenaza de la vida simple persiste ya que si se visualizan los datos con detenimiento es detectable que las crecientes se registraron sobre los productos de primerísima necesidad. Esto es: de no lograrse un fuerte impacto activo en los ingresos sociales sobre comienzos del año venidero, el deterioro en la venta y por tanto en la realización de productos con mayor nivel de elaboración puede aplanar la vida nacional en una subsistencia digna pero carente de valor agregado y, eventualmente, de progreso. Para que se comprenda y sin menoscabar rubro alguno: se comprarán más galletitas pero pocos pensarán en adquirir cocinas, termotanques o heladeras. Y, como dijo alguna vez Pablo Aldo Perotti en El puntero, “la heladera es la familia”.
Lo cierto es que la recuperación continúa circunscripta a unos pocos sectores de alimentos y bebidas, y –debido a las precauciones relacionadas con la higiene- a los productores de químicos. El problema vuelve y vuelve: ante el sostenimiento de ventas los elementos de primera necesidad fueron incrementados entre 19% y 25%. Un indicio que cabe considerar es el creciente protagonismo de Paula Español, la hasta ahora desconocida Secretaria de Comercio Interior. En afán morenístico que ya recriminarán falsos demócratas, tuvo una discusión agria, potente y profunda con varios empresarios líderes en sus actividades por el tema precios.
¿Quiénes siguen en la lona? Esto lo decimos nosotros. Con una contracción superior al promedio de la industria se encuentran el área textil, la del tabaco, la metalmecánica, los minerales no metálicos, la siderurgia y la producción automotriz. Peor aún se encuentra el rubro de los bienes de capital, pues al reducirse la producción, la demanda de máquinas herramienta es bajísima. En síntesis, el asunto sigue siendo grave.
PRESUPUESTO 2021. Nuestras Fuentes recobraron la sonrisa. “El Presupuesto 2021 será un arma para impulsar el consumo” afirmaron, mientras desdeñaban la caracterización esgrimida por algunos medios económicos sobre el deseo oficial de insertar anabólicos. “Cada vez que se adopta una medida impulsora del bienestar hablan de artificios” porque “creen que el dinero sólo puede ir hacia subsidios empresariales”. Tras la queja, anunciaron que entre los sectores a mejorar se cuenta “la Educación” y esperan que ello licúe algunos tironeos que hoy sacan chispas.
En dos semanas, el gobierno presentará su propuesta. Esta vez, Martín Guzmán se zambullirá en el Congreso para hablar de todo, no sólo de la deuda externa. Sobre una línea productivista, afincada en la intención de promover la industria, el ahora popular tripero disertará sobre la expectativa de inflación, el volumen y el sentido de la emisión, el necesario equilibrio del tipo de cambio, la situación de las arcas fiscales con datos de ingresos y gastos.
“El gobierno buscará recomponer el empleo a partir del consumo. Al revés de lo que se está diciendo, tenderá a mejorar el salario promedio y la asistencia social. No te olvides, además, que es un año electoral y Alberto Fernández tiene claras sus prioridades políticas”. Como enlace con el armado que proyectará el Presupuesto, realizamos un añadido en esa dimensión política. Aunque los embates mediáticos para promover la división interior son duros, el Frente para la Victoria y el Frente Renovador siguen juntos. Alberto y Cristina, Massa y Máximo, son los pilares sobre los cuales se asienta la continuidad de la coalición oficial.
Lo explicó bien uno de los directores del Banco Nación designado por Alberto Fernández. Guillermo Wierzba, de extensa tradición nacional popular, recordó que cada paso involucra una batalla cultural en sus intersticios. Definió los espacios con precisión escasas horas atrás. La ofensiva liberal propone “La desregulación del mercado cambiario, de la tasa de interés, de la regulación del destino del crédito, del movimiento de capitales de y hacia el país, la desarticulación de los controles de precios, la disminución de la presión fiscal, el ajuste del gasto público, la flexibilización del mercado de trabajo y la reforma privatizadora del sistema previsional. El factor común y la clave de esta visión ortodoxa es la desintervención estatal de la economía”. Esos son los ejes de la propaganda mediática, ocasionalmente traducida en vulgares consignas.
Por otro lado, la visión nacional. “Debe ser el Estado y no el mercado quien dirija y realice los procesos de innovación tecnológica, restaurando el cálculo financiero tradicional ligado a lógica del capital productivo, que lidia mucho mejor con el concepto de incertidumbre que el del inversor privado del capitalismo financiarizado”. Por eso “Ya no sólo se debe combatir el prejuicio que sostiene que el Estado investigador, inversor y productor es de calidad inferior a la del gran capital privado extranjero, sino que está en mejores condiciones de liderar un proyecto de desarrollo. Mejor dicho, está en condiciones de conducirlo mientras que el capital privado extranjero carece de esa capacidad”. Vale realzar una presencia de esta naturaleza en la entidad crediticia estatal.
PROVINCIAS. El impulso a la construcción no fue el único elemento activo puesto en marcha por el gobierno nacional durante los días recientes. Ahora resolvió presentar ante el Congreso un proyecto de ley por el que el Tesoro se hará cargo de las deudas de las provincias para pagar los haberes jubilatorios de más de 800.000 personas que estaban contempladas en la ley de reparación histórica. ¿Tendrá solución satisfactoria el conflictivo tema de las jubilaciones? Hasta ahora ha sido un cachetazo justificado sobre la gestión, propinado por quienes desde un super peronismo y la izquierda exigen justicia y mayor circulante. Razones, no les faltan.
Cómo fue. Las autoridades alcanzaron un acuerdo con los gobernadores que se canalizará en esa ley con sentido dual: evitar el desfinanciamiento del Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la Anses que afronta el pago de haberes jubilatorios y también aliviar a las provincias de asumir esa erogación mediante recursos de la coparticipación federal. Las Fuentes se mostraron optimistas, pues prevén que el hecho se convertirá en una “ayuda importante a las provincias sumergidas hoy por la pandemia”. El pacto para presentar la iniciativa se logró tras una reunión efectuada al cierre de la semana hábil por Guzmán, su colega de Interior Wado de Pedro, el titular de Diputados Massa, el presidente del bloque Máximo, la jefa del Anses, Fernanda Raverta y 20 gobernadores de distintos bandos.
“Fue una reunión muy práctica” nos comentaron. “Su desarrollo mostró que el blanco – negro es más promocional que real. Cada uno de los presentes tiene que resolver problemas y el gobierno ofrece salidas. Las coincidencias surgieron naturalmente”.
GESTOS. Finalmente, causaron conmoción dos hechos muy recientes. El gobierno declaró a la telefonía celular y fija, a los servicios de internet y a la TV paga como servicios públicos esenciales. Por eso dispuso congelar los precios hasta el 31 de diciembre del 2020. La medida se adoptó mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia.
Asimismo, el presidente recibió el sábado al líder camionero Hugo Moyano en la Quinta presidencial de Olivos. Durante seis horas analizaron la realidad laboral argentina, dejaron que trascienda la noticia y se dedicaron mutuas sonrisas.
Las dos acciones, de neto corte político económico, configuran golpes fuertes sobre el Grupo Noble – Clarín. Tome nota, lector.
Las primeras sombras de la noche rasgan el cielo. El viento narra historias al acariciar las hojas. Es hora, para este periodista, de cerrar el texto y disfrutar con lentitud de unos mates sencillos, fuertes, placenteros.
El tiempo que esa labor implica es ordenador; deja la inquietud en su justo lugar.
- Área Periodística Radio Gráfica / Director La Señal Medios / Sindical Federal
