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Héctor Recalde, abogado laboralista de extensa trayectoria, diputado mandato cumplido y hombre del campo nacional, conversó en el aire de Radio Gráfica acerca del papel del movimiento obrero en el gobierno de Alberto Fernández y un tema áspero: la relación que tendrá el futuro presidente con el Poder Judicial.
En diálogo con el equipo de Ya nada será igual Recalde explicó en primer lugar que “hay que darse una política de generación de cuadros judiciales. Yo fui parte del Consejo de la Magistratura, y muchas veces por la deficiencia de formación de los candidatos se terminaba eligiendo al menos malo. Falta una enseñanza y una práctica para que los abogados estén integrados en nuestro espacio político, o en espacios similares, y se formen con aquellos que tienen una prosapia en el Derecho y la Justicia, que los lleve a ocupar espacios. En la medida que se active más la militancia al respecto se van a suplir las lagunas que hay en el Derecho respecto al pensamiento nacional“.
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Un tema planteado fuertemente por el Gobierno saliente en estos cuatro años de mandato fue la flexibilización laboral. Allí un eje central fue la baja o directamente supresión de las indemnizaciones por despido, la posibilidad de las empresas de desprenderse de los trabajadores con facilidad, sin costos o al más bajo posible.
El ex diputado también puntualizó durante la charla con el equipo de La Señal Medios que “remplazar la legislación laboral por un seguro de desempleo sería inconstitucional. La Constitución consagra la protección contra el despido arbitrario, o sea lo contrario a ir al despido libre. La indemnización es un límite relativo, no absoluto, para que si el empleador despide le cueste. Por otro lado hay países que tienen protecciones absolutas contra el despido. A algún pequeño empresario le puede costar más despedir en nuestras condiciones, pero no tanto al grande, y todo depende del proceso económico general. El Derecho Laboral no crea ni destruye empleo, lo hace la economía“.
Futuro, lo que viene en el nuevo período político que se abre y la posición del movimiento obrero en ese escenario. Al respecto Recalde anticipó que “seguramente se va a escuchar a los sindicatos en el próximo gobierno. Es una de las ramas del peronismo, y nadie puede negarle peronismo a Alberto [Fernández]. Al mismo tiempo se viene dando bastante bien un proceso de unidad de las centrales obreras. La actitud de Hugo Yasky, al decir que la CTA se va a integrar a la CGT dejando él su puesto de Secretario General de la CTA es un gesto de grandeza que busca realmente poner por delante los objetivos de principios. La unidad del movimiento obrero organizado es un valor en sí mismo. La discusión tiene que ser interna, pero hacia afuera todo el mundo unido. Por eso aplaudo el gesto de Yasky, o las actitudes de Héctor Amichetti, la Federación Gráfica Bonaerense y la Corriente Federal de Trabajadores“.
MG/LM/GF/RG
