BIGtheme.net http://bigtheme.net/ecommerce/opencart OpenCart Templates
viernes , abril 19 2024
Inicio / Internacional / LA GEOPOLÍTICA Y SUS EFECTOS COLATERALES / La cuestión social

LA GEOPOLÍTICA Y SUS EFECTOS COLATERALES / La cuestión social

Por CARLOS CHINO FERNÁNDEZ *

Europa está convulsionada, plebiscitos disruptivos sin claros vencedores, atentados terroristas, crímenes masivos, naufragios trágicos…

El pueblo británico optó por abandonar de la Unión Europea. Fue así, pero mientras Inglaterra y Gales decidieron salirse de la UE; Escocia e Irlanda del Norte preferían quedarse. Los jóvenes, votaron en su mayoría por quedarse y las personas mayores, por salirse. Los trabajadores, en su mayoría se inclinaron por irse, y los del establishment por quedarse. Entretanto desde el laborismo prefirieron irse de la UE y los conservadores por permanecer.

En fin, una vez más las categorías de análisis: izquierda y derecha, quedaron obsoletas o son insuficientes a la hora de explicar tanto la situación política internacional, como la situación al interior de cada país. En realidad, el tan mentado Brexit, fue una jugada maestra de la inteligencia británica, que más allá del carácter ideológico de sus gobiernos, mantiene desde siempre una política estratégica estatal de largo alcance.[1]

La reciente votación en Gran Bretaña explica en parte, el reacomodamiento de los principales jugadores geopolíticos a escala planetaria y la tensión manifiesta entre un mundo unipolar que se termina y un mundo multipolar que no alcanza a consolidarse. La City Londinense, sin dejar de mirar a Europa priorizó el fortalecimiento de su relación con China, más EEUU y especialmente el avance del yuan como moneda de reserva e intercambio comercial en el mercado mundial.

El Brexit, en medio de una convulsionada Europa, también expresa la emergencia de una serie de problemas sociales que se multiplican más allá, de las fronteras europeas.

La inmigración como problema

Desde finales del siglo XX y, con mayor énfasis, desde el inicio del siglo XXI, teniendo como referencia los atentados a las Torres gemelas de septiembre de 2001 en los Estados Unidos, el denominado atlantismo, o más precisamente, el imperio norteamericano y sus principales aliados (Francia, Gran Bretaña, etc.), determinaron la centralidad del control de los recursos naturales en el marco de un reordenamiento geopolítico a nivel global.

Este reordenamiento tiene como objetivo principal el control del corazón del mundo (el espacio euro-asiático), y con él, el control de las reservas de hidrocarburos capaz de mantener sus sociedades centrales de consumo y su maquinaria financiera y militar. Es así que desde 2001/2003, no paran de destruir parcial o completamente, Estados-Naciones: Irak; Libia; Siria; etc. y, de desestabilizar otros tantos.

Las bombas arrojadas en Oriente, explotan en los barrios de París y de otras ciudades de Europa central

La población expulsada se traslada por todos los medios imaginables, de los países agredidos a territorio europeo. Es bien sabido que desde los mismos países centrales o de la alianza atlantista, usan ejércitos de mercenarios y emplean todo tipo de acciones militares y propagandísticas, con el fin de desestructurar el orden de aquellos países que tienen en sus territorios los Recursos Naturales tan apreciados por ellos.

El hombre es lobo del hombre

Ahora bien, los atentados que se vienen produciendo en Europa y que son atribuidos a lobos solitarios relacionados con el islamismo más radical, tienen varias explicaciones. O son directamente reclutados por la CIA y los servicios de inteligencia europeos o por parte de países aliados (Arabia Saudita; Turquía) o bien, son reacciones terroristas de venganza de aquellos mismos grupos fundamentalistas, que una vez manipulados y utilizados por los países agresores de occidentes, son dejados de lado y abandonados a su suerte.

Se encuentran en la periferia de las grandes metrópolis europeas, todo tipo de voluntarios y de desquiciados para estos hechos de terrorismo. De una y otra manera el imperio decadente norteamericano y sus aliados, son los principales responsables de los acontecimientos. Lobos solitarios, no tan solos

¿Qué sucede entonces con la llamada inmigración descontrolada? ¿Y qué relación guarda con la guerra en los países ocupados?

A la inmigración en condiciones de cierta normalidad. Aquella que se produce ante los cambios tecnológicos o los ciclos económicos que en algunos países, generan la emigración de población joven en busca de otras oportunidades de vida, se generaliza en la actualidad, una inmigración forzosa. Esta inmigración o expulsión que la guerra produce, es utilizada paradójicamente por los países centrales como una forma más de regular el precio de los salarios de sus propios trabajadores y de paso, disponen de mano de obra nueva a muy bajo costo.

En este orden de cosas, Europa, la vieja Europa está teniendo un crecimiento vegetativo negativo. Sin ir más lejos, España en el 2015, ha tenido más muertes que nacimientos. De esta manera, al problema de la inmigración descontrolada, se le sume una proyección muy crítica del sistema previsional y de la asistencia médica y asistencial del conjunto de la población. Cada día que pasa, son más personas las que dependen de un número más chico de trabajadores activos registrados, para sostener todo el sistema previsional y social.[2]

Era de las finanzas especulativas y terrorismo para-estatal

Esto también genera el capitalismo en esta etapa de exacerbación  de las finanzas y del terrorismo. Una y otra van de la mano. La consolidación del sistema especulativo financiero y el incremento del terrorismo son dos procesos complementarios.

La geopolítica internacional, si bien nos permite ver los cambios en el mapa del poder internacional de los estados y de los centros de gravedad en el poder mundial, no siempre nos habla acerca de la vida de los hombres, de su padecimiento y de su destino final.

Toda esta situación-manipulación mediante-, conjuga en un renovado replanteo del populismo, del nacionalismo, de los límites de la Nación y de los alcances de la idea de comunidad

El Brexit en Gran Bretaña, los atentados en Francia, el problema electoral sin solución en España, expresan los límites políticos de la bipolaridad propia del capitalismo industrial. Es necesario pensar y dar de nuevo. En última instancia no es el petróleo lo que está en juego, es la vida social, es el Hombre mismo.

18 de Julio de 2016

/ Instituto Arturo Jauretche.

[1] Thierry Meyssan: Red Voltaire, “El Brexit redistribuye las cartas de la geopolítica mundial”, 27 de junio de 2016

[2] Diario El Mundo, España, 2 de Diciembre de 2015

Comentarios

comentarios

Visite también

Vladimir Putin, en diálogo con Tucker Carlson (Texto y video completos)

    El conflicto ucraniano, el autor de los sabotajes contra los Nord Stream y ...