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Por: José Luis Ponsico (*)
Argentina y Chile, sus seleccionados, llegaron invictos a la final disputada en Chile el 30 de marzo del 1955. Ganó nuestra selección nacional con gol de Rodolfo Micheli. Chile respaldado por 65 mil espectadores en el Estadio Nacional de Santiago.
«Se puede repetir la final después de 60 años» comentó Carlos Cecconato, 85 años, para esta agencia. «La suspensión del «crack» Neymar (Junior) Brasil, especie de Diego Maradona en el Mundial de México´86 y la goleada de Chile a Bolivia, equipo que sorprendió en un momento a Ecuador; se puso 3 a 0 en ventaja, hace que uno piense en otra final con los chilenos», añadió
Cecconato, notable mediocampista de Independiente y selección nacional en los ´50, es uno de los cuatro sobrevivientes de aquel Torneo Sudamericano del´55 que Argentina ganó invicta. Los otros, sus compañeros y amigos, Rodolfo Micheli, titular, puntero derecho y goleador (hizo ocho en cinco partidos) y Osvaldo Cruz.
El restante, puntero derecho de River, Santiago Vernazza, goleador de Platense y en el equipo «millonario» cinco veces campeón en los´50, cuatro con él, antes de ser transferido al Palermo de Italia. Cecconato iniciado en El Porvenir en el´46, jugó en Independiente entre el´47 y ´58.
Hubo varias goleadas a Paraguay (5-3), Uruguay (6-1, la mayor de la historia), Ecuador (4-0), empate inesperado con Perú (2-2, gran actuación del peruano Oscar Gómez Sánchez, luego jugó en River y Gimnasia y Esgrima La Plata) y la dura final con los chilenos. Cecconato, habilidoso, organizador. Ida y vuelta.
«Chile tenía gran seleccionado. El mejor (Enrique) Hormazábal, uno de cinco de la historia con Elias Figueroa, Carlos Cazsely, Iván Zamorano y Marcelo Salas; además los hermanos Robledo (Eduardo y Jorge) y Jaime Ramírez que más tarde vino a Racing», evocó Cecconato que sale poco y vive en Bernal, rodeado de afecto.
«El gol lo hizo «Fito» (Rodolfo Joaquín) Micheli tras jugada de Angel Labruna, que a Chile llegó con 36 años, la gran figura contra Uruguay, en el 6 a 1; convirtiendo tres goles en tarde inolvidable», puntualizó el notable «peón de brega» que bautizó el «Maestro» Fioravanti (Joaquín Carvalho Serantes) en el´53.
«Brasil sin Neymar carece de la potencialidad histórica, adelante. Chile, local, con apoyo popular luego del episodio que protagonizó (Arturo) Vidal, dirigido por un argentino que dio mayor certeza al juego de ataque (por Jorge Sampaoli) también es candidato», concluyó Carlitos Cecconato, «crack» sin tiempo.
No ganaban fortunas como ahora, el fútbol super profesional con una elite de grandes delanteros nuestros en Europa. Datos recogidos es que los cinco delanteros de Independiente, Micheli, Cecconato, Carlos Lacasia, luego Ricardo Bonelli, Ernesto Grillo y Osvaldo Cruz no bajaban de 70 goles por año. Con amistosos
En la gira de fines del´53 y comienzos del´54, invierno en Europa, Independiente produjo goleadas inolvidables. El 6 a 0 al Real Madrid con Alfredo Di Stéfano en el Estadio Chamartín, ahora Santiago Bernabeu. Luego otras «palizas» al Atlético Madrid y en Portugal. Cayendo ante Athletic Bilbao 3-5.
«La casa propia en mí caso la compré en el Gran Buenos Aires cuando llevaba cinco años como titular en Independiente y tres en la selección nacional» contó Rodolfo Micheli, 85 años, no hace mucho en la Mutual Casa del Futbolista. Otros tiempos. De las páginas amarillas.
(*) Columnista de la Agencia Télam, AgePeba y La Señal Medios / La Señal Fùtbol
